Takezo abandona su condición de samurai errante para vivir tranquila y humildemente con su amada Otsu, rechazando trabajar como maestro samurai para el líder del clan más poderoso del Japón. No obstante, Takezo accede a luchar con el joven y habilidoso guerrero Sasaki Kojiro. El combate final tendrá lugar en la isla Ganryu.