Para escapar de sus acreedores, Noah acepta un trato que consiste en transportar un viejo bombardero cargado de animales a una isla del Pacífico. Además, tiene que llevar a una joven directora de orfanato, que se encargará de educar a los nativos de la isla, y a dos niños del mismo centro que se cuelan en el avión como polizones. Sin embargo, un problema les obliga a aterrizar antes de lo planeado.